viernes, 6 de junio de 2008

Quiero que me trates suavemente

Me encanta esta frase, sobretodo porque me encanta la canción. "No quiero soñar mil veces las mismas cosas, ni contemplarlas suavemente. Quiero que me trates suavemente", es como decir "quiero dejar de imaginar y quiero empezar a vivirlo". A que viene todo esto dirán ustedes?, a que esto de escribir me ha liberado de muchas cosas que no he podido hablar. Por ejemplo, que pasó con el mail de los jajas? (en mi post anterior). Nada, una buena excusa infranqueable por parte del NO-Amante, y una chuteada para otro día de la cita, me imagino, que hasta que la mina se le pasen las ganas de comerselo (la mina soy yo por siaca). Y esto me deja pensando en que debo hacer dieta para verme regia y debo volver a ser la mina que ya no quiere nada con Él, salvo una linda amistad. Es raro, la vez en que estube en esa parada, Él me invitó sin pelos en la lengua a tener mi despedida de soltera, aunque en el intertanto, el mismo la pospuso por cargo de concienza, en varias ocaciones. Bueno, en realidad no es raro, es lo normal de estos especimenes de hombres (no los catalogaré de todos iguales). Como dice mi amiga Cucha "estos siempre vuelven cuando una ya esta bien... después de que te dejaron pa la cagá, vuelven con las manos en los bolsillos, mirando para otro lado con un "hola, como estay?", como si nada hubiera pasado". Y digamoslo, tiene toda la razón!

Bueno, quede picada, lo notaron?. Pero, según yo, respondí dignamente el mail que me envió con su excusa, y hasta me agradeció de vuelta, por lo comprensiva. -Fidji, que falsa!- pense para mis adentros, pero quede internamente feliz de mi cinismo (y también del suyo). Aun así, esto es literalmente quedarse con los crespos hechos.

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